Nueva York- a pasión de dirigir en las mayores no ha desaparecido en Joe Torre. Luego de sus años de gloria en Nueva York con los Yankees, ahora busca hacer lo mismo en Los Ángeles con los Dodgers, uno de los equipos más tradicionales de todo el béisbol.
En dos temporadas ha hecho del equipo angelino contendor en la División Oeste de la Liga Americana, ganando los dos últimos títulos y avanzando a la postemporada.El gran piloto, ganador de cuatro Series Mundiales y seis títulos de la Liga Americana, dio una interesante entrevista desde Arizona en la que confirma su pasión por el juego y, por su puesto, por ganar partidos.
¿Cuál es la gran diferencia cultural entre dirigir a los Yankees y a los Dodgers?
La actitud de hazlo ahora o muere en el ámbito deportivo en Nueva York es mucho más grande. Se ha convertido en más que una forma de vida. Es todo para muchas de las personas que viven allá. Los aficionados son apasionados en Los Ángeles, pero la necesidad de ganar todo el tiempo en la Costa Este es bien difícil de derrotar. Ganar es la única cosa aceptable, lo cual es un complemento en muchas formas porque le hemos dado una razón para que se sientan de esa forma. Así que ganar creó trajo la presión. Para mí, la presión en Nueva York, algo que eventualmente me pasó.. estábamos ganando los títulos divisiones, estábamos yendo a las postemporada, debíamos ponernos a prueba a nosotros mismos. Eventualmente, eso me desgastó porque no les podía decir a mis jugadores que no estaba orgulloso de lo que habían hecho hasta ese punto.
Le gustaría tener un equipo con gran talento con un deseo promedio, o un equipo de talento promedio con un gran deseo?
Un equipo con un talento promedio y con muchos deseos. Realmente me gustaría.
Es bonito tener jugadores con gran habilidad, pero si ellos no tienen ese deseo ardiente por dentro de ganar, estaría muy decepcionado. Es grandioso ganar, y el chance es que ganas con un equipo de gran talento, pero como dirigente es más gratificante para mí que los muchachos en el terreno estén dando lo mejor de su talento porque ellos saben que es necesario para ganar.
Usted es uno de esas personalidades en los deportes que tienen mucho dinero y gloria y todavía quieren más. Es eterna la necesidad de ganar?
Creo que sí. Seguro, es un ego grande el ganar juegos de pelota. Nunca se pone viejo. Recuerdo que luego de ganar la Serie Mundial en 1996, mi esposa Ali, me dijo “vamos a retirarnos”. Y le dije “Veremos si podemos hacerlo de nuevo”. Eso de ganar no disminuye. Pero una vez de que sientes.. que los jugadores no están respondiendo, ese es el momento de retirarse.
Cuál dirigente de un equipo contrincante es el que más problemas le ha dado?
Mike Scoscia, de los Angelinos de Los Ángeles. Él es una combinación de un hombre técnico e instintivo. Mike está próximo a ser uno de los grandes dirigentes. Tony Larissa, de los Cardenales de San Luis, es otro. Siempre busca la manera de cortarte el corazón. Somos buenos amigos, pero cuando estamos en el terreno no hay amistad.
