Tuesday, May 4, 2010

La metamorfosis de Robinson Canó como bateador

Sadiel Lebrón/BEA

El Bronx- El segunda base dominicano Robinson Canó siempre fue catalogado como un bateador extraordinario. Lo demostró en las ligas menores y en el béisbol invernal dominicano.

Pero donde más se ha dado gusto bateando es el “big show”, el béisbol de Grandes Ligas.

Desde que debutó en las mayores en 2005, el fino bateador oriundo de San Pedro de Macorís ha repartido palos por todos los lados del terreno de juego, lo que le ha llevado a conseguir un promedio de .309 de por vida.

Su repunte en 2009 (.320-25-85), tras un año “malo” (.271-14-720) en 2008, y la partida del japonés Hideki Matsui hacia los Angelinos de Los Ángeles, hizo que el dirigente Joe Girardi le encomendara la tarea de ser el quinto en el orden de bateo de los Yankees, algo que el dominicano ha asumido con responsabilidad, más aun cuando los toleteros y corazón ofensivo del equipo Mark Teixeira (.175-2-12) y Alex Rodríguez (.253-2-16), comenzaron sumamente lentos.

“Sé que están pasando por un bache ofensivo, pero cuando ellos comiencen a batear yo voy a tener que seguir produciendo para que los lanzadores les tiren lanzamientos Buenos”, dijo Canó durante una conferencia de prensa que ofrecieron los Yankees este martes en el Yankee Stadium. “También está después de mí Jorge Posada, que es un bateador de respeto”, añadió.

A pesar de ser un bateador de contacto, Canó no se había destacado en el plato con corredores en posición de anotar, algo que le hizo recapacitar y tomar medidas al respecto. Ahora todo ha cambiado. Ha mejorado mucho y el jugador petromacorisano agradeció a su padre y sus compañeros más veteranos por los conejos que le dieron para mejorar.

“Durante el verano hablé con mi papá y él me dijo que le tirara a todos las bolas que iban de strikes. También les pregunté a mis compañeros algunos consejos de cómo mejorar”
El intermedista del equipo neoyorquino indicó que ahora se siente tranquilo porque ya no está en la zozobra de que será cambiado, aunque dijo entender que era parte del negocio.

“Desde que estaba en mi segundo año en las menores, que fue en 2002, venía escuchando rumores de que iba a pasar a otro equipo, que estaba en medio de este cambio, del otro, pero ya no le doy mente a eso y sólo salgo al terreno a hacer mi juego. Le agradezco a los Yankees por darme la oportunidad y confiar en mí”.

Canó es hoy por hoy el jugado más consistente con el madero por los Yankees, lo que le ha valido a tener el mejor inicio de su carrera. Hasta el partido de este martes, que ganaron los Yankees 4-1 sobre los Orioles y en el que bateó de 4-2, Canó presenta un astronómico promedio de bateo de .376 (101-38) con 9 jonrones y 21 remolcadas en 26 cotejos. Además su promedio de embase es de .420 y un promedio de slugging de .723, superando por mucho toleteros como Teixeira, y A-Rod, tercero y cuarto bate, respectivamente, de los Bombarderos de El Bronx.